sábado, 5 de septiembre de 2009

CARACAS
Grupos oficialistas y opositores comenzaron hoy a concentrarse en dos puntos opuestos de Caracas para marchar a favor y en contra del presidente venezolano, Hugo Chávez, y de la "revolución'' que lidera desde hace una década.

Con el lema "por la libertad y la democracia'', miles de opositores se reunieron en el sector Chacaíto, este capitalino, para marchar hasta la sede de la Fiscalía, en el centro, en repudio a la supuesta política de ‘‘acorralamiento'' de la disidencia por parte del Gobierno con el presunto apoyo de ese organismo judicial.

Asimismo, otros miles de afectos al Gobierno se concentraron en la Plaza Catia, en el oeste, para luego desplazarse hasta la sede de la cancillería venezolana bajo el lema "Venezuela zona de paz''.

La movilización oficialista se enmarca en la jornada mundial "En pie de paz'', lanzada ayer en Caracas y en "50 países'' para enfrentar la política "guerrerista'' de Estados Unidos hacia Latinoamérica.

La campaña internacional "chavista'' también es una respuesta "de paz y de justicia'' a la supuesta "incitación al odio y al magnicidio'' que representaría la jornada mundial "No más Chávez'', cumplida ayer en varios países y convocada a través de las redes sociales Facebook y Twitter.

Anoche, el mandatario venezolano afirmó que la jornada mundial en su contra fue un "fracaso'' y sostuvo que detrás de esa iniciativa está la Central de Inteligencia de Estados Unidos, CIA.

jueves, 30 de julio de 2009

ATAQUE FRONTAL A LA LIBERTAD DE PRENSA EN VENEZUELA

Un manifestante exige respeto a la libertad de expresión en Venezuela, durante las protestas contra el cierre de RCTV, en esta fotografía de mayo del 2008. La Fiscal General de la República Bolivariana, Luisa Ortega Díaz, propuso, este 30 de julio de 2009, sancionar a las personas y dueños de medios que divulguen informaciones que atenten contra el orden público y la "salud mental" y llamó a los congresistas a limitar la libertad de expresión.


La Asamblea Nacional (AN) de Venezuela comenzó el jueves la discusión de un proyecto de ley que establece nuevos delitos mediáticos, sin precedentes en la legislación venezolana.

De ser aprobada, la ley castigaría con prisión de hasta cuatro años la divulgación de información que pueda ser interpretada como una incitación a la violencia o que afecte la salud mental de los venezolanos.

En una comparecencia ante la AN, dominada por el chavismo, la Fiscal General, Luisa Ortega, presentó el proyecto de Ley Especial contra Delitos Mediáticos, afirmando que se trata de un instrumento legal para "regular conductas de los medios de comunicación y quienes trabajen en ellos''. 

"Los medios de comunicación no pueden ser utilizados para cometer hechos punibles ni tampoco para coadyuvar en esa comisión'', dijo Ortega durante su discurso del jueves por la mañana ante la AN.

La ley establecería que pueden ser objeto de sanciones no solamente los directivos de medios privados o públicos, sino prácticamente "toda persona que se exprese a través de cualquier medio de comunicación , sea éste impreso, televisivo, radiofónico o de cualquier otra naturaleza''.

Asimismo, describe como delitos mediáticos las "acciones u omisiones'' que atenten contra "la paz social, la seguridad e independencia de la nación, el orden público, estabilidad de las instituciones del Estado, la salud mental o moral pública, que generen sensación de impunidad o de inseguridad''.

Un directivo de un medio puede sufrir prisión de seis meses a dos años cuando se niegue a revelar la identidad de una firma anónima o que usa seudónimos en artículos considerados ofensivos o alarmantes. Se cita como "coacción mediática'' la utilización de un medio para "amenazar, intimidar, coaccionar o de cualquier otra manera infundir un terror a otros'', lo cual sería castigado con pena de prisión de uno a tres años.

El proyecto de ley es visto por organizaciones gremiales, académicos y propietarios de medios como un ataque directo a los medios privados que divulgan información adversa al gobierno del presidente Hugo Chávez. Igualmente, generó rechazo y críticas dentro y fuera de Venezuela.

La legislación tendrá "terribles consecuencias para la vida cotidiana de todos'', advirtió el Colegio Nacional de Periodistas (CNP), en un comunicado emitido el jueves.

"¿Qué entiende la Fiscalía por Delito Mediático? ¿El uso deliberado de un adjetivo? ¿Una apasionada polémica pública entre dos articulistas? ¿La parodia política de un humorista? ¿La publicación de una denuncia que afecte intereses sacrosantos? ¿Las cifras sobre las índices de criminalidad? ¿Las críticas ante los excesos de un poderoso?", indicó el comunicado del CNP.

El anuncio se produce en medio de amenazas emitidas por Chávez de cerrar el canal de noticias Globovisión y el inicio de procedimientos administrativos contra más de 240 radioemisoras. También ocurre un día después de la detención del periodista Gustavo Azócar en el estado andino de Táchira, por presunto desacato a la orden de una jueza que le prohibió divulgar información sobre un caso que se le sigue bajo cargos haber cobrado en el 2000 publicidad de la Lotería del Táchira, sin haberla emitido a través de su programa de televisión.

En privado, la proyectada ley ha venido siendo discutida por los diputados chavistas, según admitió el diputado oficialista Luis Tascón el jueves en declaraciones a la estación de televisión de la AN. Contiene 17 artículos y una disposición que deroga cualquier otra ley que "colida'' con el nuevo instrumento legal, de acuerdo con una copia obtenida por El Nuevo Herald y originalmente divulgada por el diario El Universal de Caracas.

martes, 28 de julio de 2009

"PRÍNCIPE DE LA MARIHUANA" SE OPONE A GUERRA ANTIDROGAS DE EEUU

VANCOUVER, Canadá -- El sonido del rock psicodélico retumba en The Vapour Lounge. Dentro de la tienda, diversas personas fuman marihuana. Y el propietario Marc Emery está allí, proclamando su meta de vencer la guerra antidrogas de Estados Unidos.

Conocido como el "Príncipe de la marihuana", durante la década pasada Emery ha empleado el correo para vender millones de semillas de esta planta por todo el mundo. Al hacerlo, ha atraído la atención de las autoridades antinarcóticos estadounidenses, que desean sea extraditado a Seattle.

Emery ha accedido a declararse culpable en Seattle de un cargo de distribución de marihuana a cambio de que le retiren todos los otros cargos que enfrenta, y el fiscal de distrito estadounidense está presionando para que se le aplique una sentencia de entre cinco y ocho años en una cárcel en Estados Unidos. 

El caso es el giro más reciente en la lucha de dos décadas de Emery para combatir la prohibición de la marihuana en Estados Unidos y Canadá. Para sus partidarios, es un valiente cruzado en favor del uso y la venta de una droga con valor tanto recreativo como medicinal. Para las autoridades antinarcóticos, es un delincuente y el mayor proveedor de marihuana originada en Canadá que se vende en Estados Unidos.

Emery está ubicado "exactamente en el centro" del debate en América del Norte en torno a la prohibición de la marihuana, dijo Allen St. Pierre, de la Organización Nacional para la Reforma de las Leyes sobre la Marihuana, con sede en Washington, D.C.

St. Pierre pronosticó que un juicio a Emery haría que "volviera a comenzar todo (el debate) otra vez".

Pero los funcionarios que combaten el uso de drogas ilegales dicen que simplemente andan tras uno de los 50 principales narcotraficantes del mundo. Las autoridades estadounidenses afirman que las semillas distribuidas por Emery han hecho crecer marihuana valuada en 2.200 millones de dólares.

"Hemos sido muy claros en que no tuvo nada que ver con las preferencias políticas del señor Emery", dijo Emily Langlie, de la fiscalía federal de distrito en Seattle.

El mismo Emery, dos veces candidato a la alcaldía de Vancouver y quien nunca le ha huido a la publicidad, casi parece llenarse de júbilo por la posibilidad de que el asunto llegue a los tribunales.

Considera que ésa sería la mayor plataforma que pudiera tener en su cruzada. Pronosticó que para agosto estará dentro de una cárcel estadounidense, y entonces le pedirá a sus partidarios que presionen para que sea transferido a una prisión en Canadá.

"Tengo millones de partidarios en Estados Unidos y Canadá", afirmó. "Como líder de la cultura cannabis, es mi trabajo derrotar al gobierno de Estados Unidos".

Emery, de 51 años, era un adolescente en Vancouver cuando comenzó a vender literatura que promovía el uso de la marihuana, una actividad prohibida. Hizo lo mismo en London, provincia de Ontario, e incluso llegó a hacerlo en las escaleras frente a una estación de la policía, con la esperanza de ser arrestado y llegar a los tribunales.

Al regresar a Vancouver en 1994, decidió iniciar un "negocio para promover una revolución del cáñamo", y abrió una tienda llamada Hemp B.C. en el casco de una librería comunista que había sido atacada por una bomba incendiaria, en lo que ahora se conoce como la Cuadra de la Marihuana

OBAMA, 'DE CAÑAS' CON LOS PROTAGONISTAS DEL INCIDENTE RACIAL

El presidente de EEUU, Barack Obama, se tomará una cerveza en los jardines de la Casa Blanca el próximo jueves con el catedrático Henry Louis Gates y el policía James Crowley, protagonistas de un polémico altercado racial la semana pasada.

Según informó este martes el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, con esta reunión los tres tendrán la oportunidad de conversar y de relajar un poco las tensiones. "Van a compartir unas cervezas", explicó. "A las 18 horas, está previsto para el jueves, aquí en la Casa Blanca. Si el tiempo lo permite, se hará en torno a la mesa de picnic, si no, en el Despacho Oval", dijo Gibbs.

El encuentro informal se produce después de que Gates quedara detenido por alteración del orden público el pasado día 16 cuando Crowley, que había recibido un aviso de posible robo en el domicilio del catedrático de la Universidad de Harvard, acudió a investigar qué ocurría.

Gates, una de las principales autoridades en estudios afro-americanos en EEUU, acababa de llegar de viaje y había tenido problemas para abrir la puerta de su vivienda en la localidad de Cambridge, en Massachusetts.

El catedrático asegura que Crowley le trató con desdén y que se negó a darle su número de credencial de policía Por su parte, el sargento de Policía denuncia que el catedrático le gritó y le acusó de detenerle por ser "un negro en Estados Unidos".

El presidente se vio involucrado cuando, en una rueda de prensa la semana pasada, opinó que la Policía de Cambridge había actuado de manera "estúpida".

Ante la oleada de protestas que generó esa declaración, en particular entre los sindicatos y asociaciones de Policía, Obama se vio obligado a aclarar sus palabras.

Tras el incidente, Obama llamó al agente el pasado viernes y habló con el sargento Crowley de la posibilidad de reunirse próximamente en torno a una cerveza. "Creo que fue el presidente el que hizo esta propuesta durante su conversación, Crowley en seguida dijo que le encantaba la [cerveza] Blue Moon", explicó Gibbs. Este fin de semana, también Gates decía que estaba dispuesto a tomarse una cerveza con los demás protagonistas del incidente.

La Casa Blanca espera convertir el encuentro en una oportunidad para abordar la espinosa cuestión de la raza en Estados Unidos. Según Gibbs, "el presidente lo ha presentado como la ocasión de hablar y tener una charla. Yo lo concibo como una conversación formal; la idea, tomar una cerveza".